Pienso firmemente que los hombres “auto-denominados”
heterosexuales somos muy diferentes de
las mujeres en muchos aspectos relacionados directamente con las formas en que realizamos nuestras necesidades
existenciales[1]
y axiológicas[2],
vale decir los tipos de satisfactores y las formas en que estos se utilizan. Para
la muestra una caricatura grafica que circula en la red.
LAS
NECESIDADES DE ÉL Y LAS NECESIDADES DE ELLA
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Nunca había entendido porqué las necesidades sexuales de los hombres y las mujeres son tan diferentes entre si...Nunca había entendido todas esas vainas de que las mujeres son de Venus y los hombres de Marte. Y nunca había entendido porqué los hombres piensan con la cabeza y las mujeres con el corazón.
Bueno aquí descubrí como fue.......
Una noche, mi esposa y yo nos fuimos a la cama.
Y bueno, empezamos a acariciarnos, el inevitable agarre de chichis, el trasero, etc.
La cuestión era que ya estaba listo y
en ese momento, me dice:
'Ahorita no tengo ganas mi amor, y tan sólo quiero que me abraces!' Eso me lo dice con una cara de cínica...
¡Yo dije: ¿¿¿¿¿¿¿QUEEEEEEEE????????
Entonces me dijo las palabras mágicas de toda mujer: 'No sabes conectarte con mis necesidades emocionales como mujer'. ¡NO JJOODDAAAAAASSSSSSSSSS!
Al final, el asunto era que esa noche
no iba a haber pelea, guarde los aceites afrodisíacos, apagué las
velas, quité el CD de Alejandro Sanz,(en ese momento casi siempre
funciona), apagué el equipo de sonido, guardé las de Grand Duval y demás.
Me eché un regaderazo con agua helada a ver si podía calmar a la bestia' y me puse a ver 'Discovery', a todo volumen para no dejar dormir a la hija de mi suegra... Después de un rato me quedé dormido..... Al día siguiente fuimos de compras al Supermaxi, entramos a una tienda, me fui a ver relojes mientras ella se probaba tres modelitos carísimos marca 'Liverpool'. Como mujer al fin no podía decidirse por uno u otro, le dije que se llevara los tres. Entonces me dijo que necesitaba unos zapatos que le hicieran juego! a $190.00 el par, le contesté que me parecía bien. Luego fuimos a la sección de ropa sport, de donde salimos con unas chamarras con plumas y una Bolsa Luis Vuiton o alguna guevada de esas. ¡Estaba tan emocionada! Yo creo que pensaba que me había vuelto loco, pero de todas maneras las traía. Pienso que me estaba poniendo a prueba cuando me pidió una faldita muy corta dizque para jugar tenis, si no sabe ni correr, mucho menos jugar tenis. Entró en 'shock' cuando le dije cómprate todo lo que quieras. Ella estaba casi excitada sexualmente después de todo esto; entonces dijo la palabra mágica de toda mujer: Ven papito lindo, mi 'gordo hermoso'
(y otras pendejadas que dicen
las mujeres cuando lo quieren convencer a uno de algo), vamos a la caja a
pagar.
Fue aquí cuando, de repente faltando solo una persona para pagar le dije: 'No mi amor, creo que ahorita no tengo ganas de comprar todo esto'...
De verdad, ojalá le hubieran visto la
cara, se quedó pálida cuando le dije:
'Tan solo quiero que me abraces'.
Empezó a poner cara de que se iba a
desmayar, se le paralizó la parte izquierda del cuerpo, le dio un tic
nervioso en el ojo derecho y le dije:
'No sabes conectarte con mis necesidades financieras como hombre'.
Anónimo
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Por otra parte el hombre “Súper tierno” aun cuando no se sospeche
homosexualidad, tal como se representa en la película: “Al diablo con el
diablo”.[3], tampoco es el ideal de hombre contemporáneo.
Una de las
razones (si no la principal) por la cual los hombres poco hablamos de nuestras
emociones es porque fácilmente a través de este proceso tan natural para las
mujeres , nos exponemos al mundo de una manera
que para algunas personas resulta demasiado pesada, dejé de hacerlo
después de mis primeras relaciones de pareja, pues mi existencialismo
adolescente y pueril [1], cargado
de preocupaciones reales e inexistentes simplemente cargaban de tal manera el
ambiente emocional en la pareja que imposibilitaba algún tipo de relación
viable en ese tipo de relaciones en las que la otra persona no puede ayudarte
ni siquiera escuchando tus pesadas cargas existenciales porque obviamente cada
persona ya lleva sus propias cargas. Tal vez se requeriría una terapia
especializada[2] la cual no estaba al mi alcance cognitivo, es decir
ni siquiera contemplaba esa posibilidad en mi cotidianidad de esa época a pesar
de que ya estaba estudiando psicología.
Cuando un hombre habla de sus sentimientos, sus
temores, sus debilidades, sus angustias existenciales, el suelo se resquebraja,
todo se desvanece y parece que ha
soltado un gas intestinal, todos a su alrededor se alejan disimuladamente. Pueden
empezar a circular rumores acerca de su masculinidad, sus tendencias
depresivas, cambios de ánimo repentinos, por lo cual una reacción lógica es la
de ponerse la armadura emocional, no volver a compartir tus sentimientos, (por
lo menos no con tu pareja): No esperas de tu pareja o de tu gran amiga que en
medio de una crisis emocional o una simple necesidad afectiva te diga algo
como: ¿Por qué debo salir corriendo a encontrarte cuando tú lo pides? ….Pedir
un abrazo no está bien visto para hombres como para las mujeres que en esta
cultura se les cría para expresar sus sentimientos libremente. La sociedad
entera tiembla cuando un hombre llora, a menos que la situación esté mediada
por la muerte de un ser querido. Ya no se ve tan Bien” hombres abrazados
llorando con la botella en la mano, en medio de una reunión familiar porque de
pronto “se les moja la canoa” [3]
Reclamando dicha condición heterosexual, caminamos
con la pelvis echada hacia adelante, hablamos fuerte, nos burlamos de los
homosexuales, no abrazamos a otros hombre (por lo menos no sin tragos encima),
usamos pantalones anchos desverijados[4],no ponemos mucho cuidado en la presentación
personal (para que no nos confunda con metrosexuales[5]).
Quisiera poner
sobre el tapete, el tema de las diferentes formas en que los hombres y
las mujeres realizan las mismas necesidades axiológico/existenciales. Ya ha
planteado Max-Neef, que si bien las necesidades humanas axiológicas son pocas (Nueve) los satisfactores de esas
necesidades pueden llegar a ser ilimitados. Aplicando estos principios a las relaciones de pareja, entraremos
analizar la forma en que hombres y mujeres buscan realizar cada una de ellas.
Empiezo tardíamente a pensar que la famosa inteligencia emocional
descrita entre otros por Gardner y Goleman [6] , se relaciona mucho con la habilidad social de
leer las necesidades del otro desde una perspectiva amplia, buscando entender
el rol que podamos asumir en cada situación particular y no como muchos hemos
asumido erróneamente, vale decir dar respuestas generalizadas para todas las
situaciones y relaciones de pareja que asumimos. Una lectura necesaria para
comprender las dinámicas que rigen las relaciones de pareja es sin lugar a dudas “la lectura de las
necesidades” del otro en los contextos sociales naturales que compartimos
como especie.
“lo que distingue a nuestra especie como rareza biológica,
su capacidad de procesar símbolos” (Castells, 1997, p. 52).
Saber leer al otro desde lo simbólico, entendiendo
lo que para este significa la
realización de sus necesidades con
satisfactores específicos en momentos especiales es por decir lo menos un reto
y un trabajo cotidiano que puede redundar en amplios beneficios mutuos. Esa
marcada necesidad de algunas mujeres de que se les adivine el pensamiento, es
decir, que simplemente se les anticipe a sus necesidades porque se está
pensando en ella antes que en sí mismo, es análoga a las situaciones en las que como hombres esperamos ciertas cosas de la
mujer que hemos idealizado por años en nuestro imaginario social, la mujer que
no por ser atenta pierde su dignidad personal ni mucho menos se siente esclavizada a un hombre o utilizada o sometida
a un rol social degradante y coercitivo.
[2] Paul es un
psicoanalista con una consulta en las afueras de Maryland. La serie se
desarrolla a través del día a día de la interacción con sus pacientes, y su
propia supervisión como terapeuta. Cada episodio se centra en una única sesión
de terapia con un paciente, distinto para cada día de la semana, incluido él
mismo con la sesión con su supervisora los viernes. http://www.seriesyonkis.com/ficha/serie/en-terapia#ficha_sinopsis
[3]Expresión de la cultura Caribe popularizada por canción del
mismo nombre referida a una homosexualidad reprimida que se desinhibe Con el licor. “Y Que Se Le Moja La Canoa” Embajadores Vallenatos .http://letrascanciones.mp3lyrics.org/e/embajadoresvallenatos/y-que-se-le-moja/
[4] Expresión
costeña para referirse a los pantalones caídos a la cadera exhibiendo la línea
divisoria de las nalgas al estilo Cantinflas.
[2]Afecto ,Subsistencia,
Protección, Identidad, Libertad, Participación , creación, Recreación,
Entendimiento y yo le agrego la necesidad de “Comunicación” no solo como un
satisfactor transversal sino como una necesidad axiológica en sí misma. Max Neef.
[3] Al diablo con el diablo (2000). “Desea ser el hombre más sensible del mundo; "El
Diablo" lo hace un adolescente tan sensible que pasa casi todo el tiempo
lloriqueando al reflexionar sobre las bellezas. Una Alison hippie tatuada
decide fugarse con un hombre rudo, el cual desafía a Elliot”
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